Así como el Gran Buffalo, es posible usar cada parte de la planta de marihuana — incluyendo esos tallos inútiles que siempre están obstruyendo tu molinillo y arruinando tus porros. 

Afortunadamente, esos mismos tallos tan molestos, pueden ser transformados en la bebida más amada y acogedora universalmente: el té. Existe algo mejor que una taza de té?

No importa si es frio o caliente, invierno o verano, el proceso de poner agua sobre las hojas para hacer una bebida acogedora, es casi universal. Así que deja de tirar esos tallos y comienza por infusionarlos de una vez!

Así es como se hace.

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Qué Necesitas?

– Tallos, molidos o cortados con las manos (~¼ – ½ taza) 

– Agua (obvio) (~3 tazas)

– Cualquier Saborizante (ej. otro té que disfrutes)

– Filtro (Los filtros para café pueden servir, pero a lo mejor eres muy elegante y tienes una de esas mallas para queso a la mano). O a lo mejor eres SUPER elegante y solo tienes servilletas de papel. Cualquiera funciona.)

– Agente Aglutinante (~2-3 cucharadas de tu licor favorito, o ½ taza de leche entera/ crema/ leche de coco, o ½ cucharada de mantequilla/ aceite)

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Rápidamente: Para qué necesitas un agente aglutinante? Necesitas uno? Los cannabinoides se unen fácilmente con las moléculas de grasa, por eso los comestibles generalmente se hacen con aceite infusionado de marihuana  o mantequilla. Parece haber opiniones contradictorias sobre la necesidad de un agente aglutinante en el té: algunos dicen que el alcohol es el mejor; otros advierten que agregar leche disminuirá la potencia. Te sugerimos que le des la oportunidad a los dos y nos platiques como te fue, porque no somos más que periodistas de investigación de alto calibre.

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Ahora que?

Pon el agua, las bolsitas de té (sin marihuana) y el agente aglutinante sin alcohol en una olla. (Si decidiste usar alcohol, agregarlo al principio puede causar que se hierva inmediatamente). Hierve todo y después agrega los tallos. Lleva todo a ebullición, luego agrega los tallos y revuelve con frecuencia. Después de unos diez minutos, retira la olla del fuego. Si elegiste usar alcohol, ahora es el momento de agregarlo a la olla.

Una vez que hayas completado tu elixir, es hora de colar todo  (aquí es donde vas a utilizar el filtro de café / tela de queso / toalla de papel). Ten cuidado de no quemarte! Si usaste un hervidor de agua, las bandas de goma del filtro alrededor de la boquilla son una buena manera de mantener su piel sin quemar.

Aaaaa y felicidades! Acabas de hacer té de marihuana! Puedes agregar azúcar o miel o un poco de canela o lo que quieras.

Tu estómago y tu mente te lo agradecerán. Disfruta 🙂

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